En
estos momentos se hace necesario reconocer la impecable labor que de forma
altruista e impecable han desarrollado en estas décadas, pues muchos han
olvidado que fue esta Asociación quién “inventó” Almossassa, convirtiendo dicha
actividad en una fiesta más del calendario regional. Gracias a ella se ha dado
a conocer la figura de Ibn Marwan, fundador de Badajoz y que hasta entonces
sólo los eruditos conocían.
También,
gracias a su empeño, muchos pacenses pudieron conocer su propia ciudad pues
hasta que, a mediados de los noventa, Amigos de Badajoz comenzase sus visitas
guiadas, pocos se atrevían a pasear por la plaza Alta y menos aún subir a la Alcazaba.
Ellos rompieron la invisible barrera que obligaba a la mayoría a dar la vuelta
cuando llegaban a San Juan pues a modo de “guardaspaldas” ilustrados llevaban,
a través de una plaza Alta todavía deshabitada, a centenares de curiosos que
deseaban visitar un barrio histórico abandonado y considerado inseguro.
La
Asociación Cívica, que se considera partícipe de esa voluntad de participación
social en el bien común, pide a los extremeños y en particular a los ciudadanos
de Badajoz, que apoyen la propuesta que esta Asociación va a impulsar para la
concesión de una merecida Medalla de Extremadura a la Asociación Amigos de
Badajoz.
Fdo.:
Asociación Cívica “Ciudad de Badajoz”.
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