La apatía de las Administraciones impide que se realice un Consorcio en el Aeropuerto de Badajoz

La Asociación Ciudad de Badajoz considera imprescindible la constitución de un consorcio público integrado por todas las administraciones interesadas en el desarrollo económico y social de Extremadura,como instrumento más eficaz para incrementar y mejorar la actual oferta del Aeropuerto de Badajoz.

Con este objetivo,la Asociación ha mantenido contactos a tal efecto en el último año con el Ayuntamiento de Badajoz, la Diputación Provincial, la Cámara de Comercio, la Confederación de Empresarios y la Junta de Extremadura, estando todos de acuerdo en la importancia de fomentar el Aeropuerto pero sin que nadie dé el primer paso y convoque a los demás para iniciar las conversiones que concluyan en la constitución del Consorcio.

En este sentido,la inactividad y pasotismo de las administraciones extremeñas contrasta con sus homólogas de Castilla La Mancha, donde diez instituciones se han puesto a trabajar para constituir un consorcio con el fin de dinamizar y revitalizar el desarrollo económico y social del área de actuación que le es propia y en especial la dirigida al tráfico de pasajeros y mercancías con destino y/o origen en el aeropuerto de Ciudad Real. Desde la Asociación exigimos a las administraciones que el distinto signo político que las gobierne no sea un impedimento para colaborar en la proyección del Aeropuerto de Badajoz, como no lo ha sido en Ciudad Real donde se han unido instituciones de distinto signo para buscar, por encima de intereses partidistas, el interés general de sus ciudadanos. Así, formarán parte del Consorcio del Aeropuerto de Ciudad Real las entidades de CEOE-Cepyme, Caja Castilla La Mancha, Cámara de Comercio, Diputación, Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, los ayuntamientos de Ciudad Real, Puertollano, Daimiel y Almagro y la Fundación Aeropuerto Ciudad Real.

Conviene recordar que con la constitución de consorcios en aeropuertos similares al de Badajoz en otros territorios como Cataluña, Galicia, Castilla y León o Aragón, se están consiguiendo resultados excelentes por su eficacia y por la dinamización y repercusión que ha tenido en sus economías. En este sentido, la inversión que se realiza retorna por dos vías, directamente, mediante la hostelería, con pernoctaciones de los turistas, y de una forma indirecta, a través de los ingresos procedentes del IVA de las toneladas de mercancías que llegan por vía aérea. Además, genera un importante número de puestos de trabajo en estos sectores a medida que va creciendo el número de rutas nacionales e internacionales.

Por todo ello, la Asociación Cívica "Ciudad de Badajoz" quiere mostrar su perplejidad y desazón al ver la inacción en general de nuestros gobernantes políticos y representantes empresariales a la hora de buscar puntos de unión y de trabajo para sacar adelante lo que ya está demostrado que resulta en aeropuertos similares de otras ciudades y comunidades. Asímismo, la Asociación quiere denunciar de manera especial la falta de empuje y liderazgo que, desde nuestro punto de vista, ha mostrado en la posible realización del Consorcio el Ayuntamiento de Badajoz. Desde nuestro Colectivo no podemos entender que desde el Ayuntamiento de la Ciudad donde está ubicado el Aeropuerto no se impulse un punto tan estratégico en el futuro de cualquier comunidad autónoma o cualquier ciudad como es el desarrollo aeroportuario. Este desarrollo tan sólo traería a la Región y a la Ciudad miles de nuevos pasajeros, turistas, mercancías, riquezas y, en definitiva, un desembarco de nuevos puestos de trabajo y aperturas de nuevos mercados tan necesarios, ambos, en Extremadura. Por estas incontestables razones se pide a los políticos en general y a los ciudanos implicados que hagan un ejercicio de responsabilidad civil y dejen de lado, por una vez, intereses políticos, electorales o particulares y que saquen adelante, de una vez, el Consorcio sin más dilación. Tanto la Asociación Cívica "Ciudad de Badajoz" como la ciudadanía esperan que en estos tiempos tan difíciles nuestros gobernantes estén por fin a la altura de las circunstancias.